Besos de Sangre...

Esta puede ser una de las reseñas más complicadas a la que me enfrente en toda mi vida (o por lo menos, de entre la lista de reseñas que tengo por hacer, de momento, lo es), y es que cuando uno se enfrenta a Besos de Sangre, tiene que respirar profundamente, tomárselo con calma, y tratar de pensar que es lo que puedes y no puedes decir. Que es aquello que esta permitido escribir, y que deberías obviar para no herir sensibilidades de ninguna clase.

Siempre que pienso en Besos de Sangre recuerdo la fantástica video reseña que nos brindo hace unos meses la fantástica Plexi en ese magnífico blog que comprarte con la maravillosa Lana, La Biblioteca Encantada, y que aquí os dejo para deleite de quienes no lo han visto y regocijo de los que si (se que no te mola nada que lo rememore y lo vuelva a sacar a colación Plexi, pero sabes que te quiero mucho XD), y ahora entiendo lo difícil que tuvo que ser para ella ponerse frente a la cámara para hablarnos de este libro, porque a mi me esta costando horrores hacerlo frente a esta hoja en blanco.

Bueno, es hora de meternos en materia y ponernos serios. Besos de Sangre, de Jeaniene Frost, es el primer libro de la serie Cazadora de la Noche, y lo cierto es que te deja con ganas de más de una manera en que muy pocos libros consiguen hacer conmigo.

La historia, para todos aquellos que nos gustan los vampiros, no es solo atrayente, sino que además engancha de una forma absolutamente formidable, lo que nos deja con un muy buen sabor de boca no solo cada uno de los capítulos, sino hasta su formidable final, que nos permite desear fervientemente la nueva entrega de la saga.

Una caza vampiros, mitad humana, mitad vampiro, con un talento innato para matar vampiros, y un vampiro guapo y atractivo, con una sentido del humor de esos que me encantan, muy sarcástico y con dobles sentidos, hacen una bomba explosiva.

Un libro muy interesante, y lleno de una sensualidad y una sexualidad que se desborda desde su magnifica portada, hasta las últimas páginas del libro.

¿Única pega que uno le puede tener? Ese nombre… ese nombre horrible de Crispin. ¿Por qué? Uno lleva como 30 páginas, pensando en Bones. Bones, ese hombre alto, rubio, sexi… y de repente, cuando la libido de una esta a mil por hora, todo por los suelos con cuatro palabras: “Mi nombre es Crispin”

De resto todo el libro es una autentica gozada. Desde la primera página hasta la última, disfrutareis de este libro, y esperareis con muchísima impaciencia la continuación de este espectacular libro.

Un saludo enorme desde mi Mundo Mundano, trasladado, de momento, al cuarto de mi prima, por culpa de las "obras" de la mia.